Aínsa
Visitar Aínsa es adentrarse en uno de los pueblos más bellos de Aragón, antigua capital del condado de Sobrarbe. Situada en la confluencia de los ríos Ara y Cinca y bajo la imponente silueta de la Peña Montañesa, la villa conserva un encanto único que transporta directamente al medievo.
Su casco antiguo, declarado Conjunto Histórico-Artístico, mantiene intacta la esencia medieval en cada rincón, con calles empedradas y casas de piedra que parecen detenidas en el tiempo.
El corazón de la villa es la plaza Mayor, porticada y monumental. Allí, el primer domingo de septiembre de los años pares, tiene lugar La Morisma, una representación popular que revive la victoria del rey García Ximénez sobre las tropas sarracenas, tras la aparición milagrosa de una cruz como señal divina.
Presidiendo el casco histórico se levanta la iglesia románica de Santa María, considerada uno de los mejores ejemplos del románico en el Alto Aragón. Su claustro combina elementos románicos y góticos en un espacio de gran belleza.
A pocos pasos, se alzan los restos del castillo de Aínsa, escenario del Festival Internacional de Música Castillo de Aínsa que se celebra cada verano. En su torre del homenaje se encuentra el Ecomuseo de la Fauna Pirenaica, dedicado a la riqueza natural de los Pirineos.
La esencia del Pirineo en sus pueblos

En Huesca descubrirás un mosaico de pueblos llenos de encanto, auténticas joyas que combinan tradición, historia y paisajes de ensueño. Localidades como Alquézar, Aínsa, Benasque, Jaca, Ansó, Torla o Roda de Isábena ofrecen cascos antiguos llenos de vida, arquitectura que conserva la esencia del Pirineo y rincones que invitan a disfrutar con calma.